Los esposos Benjamin y Missy Hatton sirven en uno de los sitios más remotos que puedas imaginar; no hay carreteras ni hay infraestructura. Ellos viven en la etnia amdu, alejados de casi todo lo que el mundo moderno tiene para ofrecer.
Los amdu tienen un idioma y un estilo de vida que solo ellos conocen en su valle aislado y escondido entre las montañas. De hecho, hasta que llegó el equipo misionero hace más de siete años, el idioma de la gente amdu solo era hablado, nunca había sido reducido a la escritura. Después de muchos años de arduo trabajo, los misioneros aprendieron el idioma, establecieron un alfabeto y crearon una forma escrita del idioma amdu. Las palabras escritas son el fundamento para el aprendizaje –específicamente para aprender sobre el amor que Dios tiene para ellos, como se revela en las Escrituras.
Por la gracia de Dios, después de años de preparación y mucha expectación, finalmente ha llegado el momento para contar la historia de Dios, desde Génesis hasta Jesús. ¡El Día del Evangelio llega a Amdu!
Deja un comentario