7 de febrero, 2019

A principios de esta semana, cuando Amy fue a nuestra clínica médica para un chequeo programado con el médico, descubrimos que su hemoglobina había descendido a los niveles que vimos justo antes de viajar a Australia en noviembre pasado, cuando ella recibió una infusión de hierro por vía intravenosa. Sus números de esta semana fueron iguales a los más bajos que hemos visto en cualquiera de sus muchos análisis de sangre. A medida que esa línea de tendencia continúa disminuyendo lentamente y los efectos secundarios resultantes se intensifican lentamente, estamos pensando en lo que ocurrirá dentro de cuatro semanas, cuando regresaremos a Estados Unidos para buscar más atención médica, exámenes, y (si el Señor lo permite) un diagnóstico para Amy. Alabamos al Señor porque, aprovechando nuestros ahorros y los regalos oportunos de algunos amigos queridos, tuvimos los fondos necesarios para comprar nuestros pasajes de avión. Lo alabamos por la paz que nos está dando en medio de esto y nos regocijamos porque el Gran Médico nos ha vinculado con dos médicos fantásticos que están tratando de conectarnos con los recursos médicos adecuados en el oriente de Texas.
En enfermedad o en salud, Dios es bueno.
Como mencionamos en nuestro último informe, desde que llegamos a PNG, en el año 2016, hemos considerado la posibilidad de comprar un vehículo y una casa aquí algún día. Debido a que otra familia de la aviación va a cambiar de campo misionero en este mes, esa posibilidad se volvió más real, pero con el tiempo y el gasto de nuestro viaje médico pendiente, no estábamos seguros. Oramos; y algunas personas dieron un paso al frente y bendijeron ricamente a nuestra familia con sus generosas donaciones. Oramos, y luego, durante los últimos dos días, el Señor permitió que todas las cosas encajaran perfectamente, de tal manera que mañana por la tarde tenemos una cita para firmar un contrato de venta de una casa y un carro. Si bien tendremos que realizar pagos durante algún tiempo, con el fin de liquidar el saldo total, el Señor, Jehovah Jireh, nuestro proveedor, proveyó las finanzas necesarias para hacer el pago inicial.
En necesidad o en abundancia, Dios es bueno.
Recientemente un amigo compartió esta cita:
Todos afrontamos una serie de grandes oportunidades brillantemente disfrazadas de situaciones imposibles.
Chuck Swindoll
Afortunadamente servimos al Dios para el que nada es demasiado difícil (Jer. 32:17 & 27) y nada es imposible (Mateo 19:26; Lucas 1:37).
Solo queríamos hacer una pausa y aprovechar la oportunidad para dar la Gloria a Dios por lo que él ha hecho a nuestro favor, por lo que está haciendo ahora, y por lo que tenemos la fe de que él seguirá haciendo en las próximas semanas y meses. Él actúa por amor a nosotros y por amor de su nombre, y nosotros podemos magnificarlo entre las naciones para que todos sepan que:
DIOS ES BUENO –EN TODO TIEMPO Y EN TODA OCASIÓN
Deja un comentario