
1 de enero, 2019
El YO SOY, el Dios que sostiene su propia existencia desde la eternidad pasada hasta la eternidad futura, que fue, es y será victorioso. El único Dios del universo es el poder que sustenta los miles de millones de estrellas cuya magnitud no podemos comprender. Él es nuestro Dios, él es nuestro Padre y él llena nuestros pulmones con el aliento hoy. ÉL ha decidido confiarnos un año más de vida.
¿Qué te ha confiado él a ti específicamente?
¿Qué harás con este regalo, esta oportunidad, este privilegio en el año 2019?
¿Has decidido bajar de peso?
¿Conseguir un mejor empleo o un ascenso?
¿Hacer más ejercicio?
Bien, pero te desafío a que tomes la decisión de hacer algo más grande.
Haz más profundo tu andar con él en este año, persevera en las situaciones difíciles, aférrate a Dios con fe, para que puedas madurar y llegar al año 2020 después de haber vivido un año abundante conociendo el amor que el Padre tiene por ti, la paz que Jesús te ha traído y la comunión con el Espíritu Santo. ¡Que vivamos el 2019 reflejando a nuestro Salvador Jesucristo ante el mundo!
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