22 de junio, 2018
Estoy aquí, en Sanford, Florida, en la sede principal de Ethnos360, escuchando a misioneros que han servido en todo el mundo —vidas dedicadas a la tarea de alcanzar con el Evangelio a “los pueblos no alcanzados”. Estoy tomando la Orientación Pre-Campo, preparándome para “ir” a Papúa Nueva Guinea, un lugar al que todavía me toma un tiempo encontrarlo en el mapa, un lugar en el que nunca he estado y, francamente, un lugar al que nunca hubiera querido ir. Pero a medida que escucho las experiencias de las personas, tanto las que han estado en la organización desde hace treinta años y las que se dirigen al campo, como yo, me hace pensar que Dios escribe cada una de nuestras historias de manera específica y única. De vez en cuando vislumbro la magnitud de eso y la asombrosa obra de Dios para orquestar nuestros caminos y Sus planes y propósitos para nosotros.
¿Estás familiarizado con la exhibición de la selva tropical en el zoológico de Fort Wayne? ¿El mapa y las fotos de indígenas al comienzo de la exposición? ¿O quizá fue solamente a mí a quien le pareció que eso era muy fascinante? Cuando lo vi en la escuela de secundaria, no sabía nada sobre misiones ni sobre los grupos étnicos del mundo, pero eso despertó algo en mí. Aproximadamente al mismo tiempo, la pequeña iglesia a la que yo asistía en Huntington, estado de Indiana, tenía misioneros que servían en la región del Pacífico Asiático en una escuela misionera, y esa fue realmente mi primera exposición a misiones. Incluso en aquel entonces, hace veinte años, Dios despertó en mí el deseo de apoyarlos.
Adelantemos el tiempo tal vez unos quince años, y una pareja a la que yo conocía, Megan y Jared Hood, se reunieron conmigo para hablarme acerca de sus próximos planes de trasladarse a Tanzania para participar en el esfuerzo de alcanzar al ‘pueblo R’ con el Evangelio. Esa fue realmente la primera vez que oí hablar de varias cosas, y estoy eternamente agradecida por el entendimiento que ellos me dieron en esa reunión y en los meses y años siguientes. Espero transmitirles este entendimiento a ustedes —qué se entiende por “pueblos no alcanzados”, cuál es el papel de la iglesia para alcanzarlos, y cómo es que Dios tiene una parte para cada creyente en las misiones mundiales. Si tienes dudas de eso o no puedes imaginar cómo podría ser posible eso para ti, solamente espera, yo voy a compartir eso contigo. Pero si eres cristiano, primero debes entender por qué debes preocuparte por esa persona que vive en un país del que nunca habías oído hablar y que nunca ha tenido la oportunidad de conocer a Cristo. Este es un gran video [en inglés] acerca de lo que dice la Biblia sobre las misiones.
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