5 de enero, 2018
Queridos amigos, familia, y quienes apoyan nuestro ministerio,
¡Feliz Año Nuevo! Muchas gracias por sus fieles oraciones y su apoyo durante el año pasado. Es posible que hayan notado que los viajes fueron un tema del año que pasó para nosotros. El Señor ha tenido mucha gracia con nosotros y ha suplido todas nuestras necesidades, nos ha protegido en cada viaje, nos ha sostenido mientras hemos tenido que estar separados, y nos ha dado estas oportunidades de servir a compañeros misioneros de otras zonas mientras que el número de misioneros nuevos aquí en nuestro sitio ha sido bajo.
Quizá también recuerden que estábamos ansiosos por pasar un tiempo “juntos” durante las vacaciones de Navidad. También estamos muy agradecidos por los buenos recuerdos que el Señor nos dio como familia durante las vacaciones escolares de nuestros hijos; de antemano, DJ y yo teníamos la esperanza de poder tomarnos una semana libre para pasar tiempo con ellos. Eso no sucedió, pero pudimos trabajar a medio tiempo durante dos semanas de sus vacaciones, lo que nos dio tiempo para descansar y divertirnos como familia.
Los chicos regresarán a clases el 9 de enero, el mismo día que yo (Jennifer) iniciaré mi nuevo viaje. Pienso asistir a un taller de alfabetización y luego a dos semanas de reuniones consecutivas de consultores en la isla donde vivimos antes, y regresaré a “casa”, a DJ y nuestros hijos el 23 de enero. Como siempre, apreciamos sus oraciones por mis viajes y por la intensa agenda de reuniones (para discutir algunas cosas muy importantes que afectan el programa de aprendizaje de idioma y cultura de todo nuestro campo), también por DJ y los chicos mientras siguen con la vida, la escuela y el ministerio aquí durante mi ausencia.
A principios del año pasado les pedimos que oraran para que el Señor levantara más obreros para la cosecha de este campo, pues no íbamos a recibir ninguna familia nueva para el estudio de idioma y cultura durante todo el año (una situación muy inusual durante los últimos quince años de historia de nuestro campo). Bueno, parece que el Señor está diciendo ‘sí’ a esas oraciones en este año. Parece que vamos a recibir una nueva familia y una soltera en marzo, tres familias en julio, y varias familias (todavía no estoy segura de cuántas) en noviembre; sobra decir que estamos muy emocionados.
También anhelamos sus oraciones a medida que retomamos la rutina de la carga completa de trabajo aquí, al mismo tiempo que continúa la necesidad de que yo haga viajes a la isla donde vivimos anteriormente para ayudar con la consultoría. La única consultora que sirve actualmente en esa región se va a trasladar a una aldea para aprender un nuevo idioma y una nueva cultura a partir de este año, por lo que dedicará la mayor parte de su tiempo a ese ministerio durante muchos años. Por favor, oren para que el Señor levante compañeros de trabajo con aptitud para la consultoría, para que se unan al equipo, tanto aquí en nuestro sitio como en otras regiones donde el equipo de consultores tiene poco personal.
Muchas gracias por todas sus oraciones. No queremos sonar como un disco rayado, pero realmente hace una gran diferencia que ustedes nos presenten ante el trono de la gracia.
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