Stephen se paró valientemente en el grupo de nuevos creyentes de una aldea de los wahgis del norte y declaró: “Confiar en Jesús es la única manera en que podemos ser reconciliados con Dios”.
El misionero Dan Hulley acababa de presentar la última lección de la serie de lecciones bíblicas fundamentales y preguntó si alguno de los creyentes quería dar testimonio de su fe en Jesús.
Anteriormente Stephen fue un líder espiritual de la aldea, el cual les enseñaba a los aldeanos que la obediencia a la Ley era la única manera de estar bien con Dios. Él compartió que ahora sabe que sólo Jesús lo ha salvado de su pecado.
Después de escuchar las lecciones bíblicas fundamentales enseñadas por Dan, Stephen tuvo un claro entendimiento de la salvación y de que hacer buenas obras y guardar la Ley era inútil sin confiar en Cristo.
Luego Wirol, otro creyente wahgi del norte dijo: “El velo del templo se rasgó en dos porque Jesús, por medio de Su muerte en la cruz, abrió la puerta para que podamos volver a estar con Dios”.
“Alaben a Dios por estos dulces testimonios”, pidió Rachel Hulley, “y oren para que estos nuevos creyentes crezcan en la fe y se conviertan en lumbreras de la comunidad”.