Memorias defectuosas
11 de septiembre, 2016
Las memorias de las personas son defectuosas. Y por causa del “síndrome de la memoria defectuosa”, las historias orales cambian a medida que se transmiten de una generación a otra. Pero la Palabra de Dios no va a cambiar. Ahí es donde entra en juego la alfabetización.
La alfabetización preserva la Palabra de Dios
“Tenemos el enorme privilegio de que nos enseñen a leer a una edad muy temprana”, comentaron Bryan y Martha Conard, anteriores miembros del personal del Instituto Bíblico de New Tribes y quienes actualmente están estudiando en el Centro de Capacitación Misionera de NTM para ser plantadores de iglesias en un entorno transcultural.
“[Sin embargo], lo que parece un ‘derecho’… de las personas en nuestros países, es un concepto completamente desconocido para muchas personas en todo el mundo. En muchos de los grupos étnicos no alcanzados que todavía existen hoy día, ninguna persona… ha podido leer en su propio idioma”.
Imagina por un momento que eres analfabeta. Imagina que no puedes leer la Palabra de Dios por ti mismo. Imagina que nunca puedes decir con confianza: “Así dice el Señor”.
Dicha confianza se desvanece aún más cuando te das cuenta que estás confiando en verdades extraídas de los archivos de la memoria no tan perfecta de tu bisabuelo.
Ahora detente y considera que para algunas personas esa es su realidad.
Es por eso que Bryan dice que la Palabra de Dios escrita es “un regalo sumamente precioso de Dios que es tangible y necesario para la vida”. ¡Y poder leerlo es un gran beneficio!
Una iglesia que sabe leer y escribir
Queremos ver grupos étnicos alcanzados con el mensaje del Evangelio. Queremos que tengan el privilegio de leer y estudiar la Palabra de Dios por sí mismos. Y queremos que ellos pasen la Palabra de Dios escrita a las generaciones futuras, sin ser cambiada por los recuerdos defectuosos.
Es por eso que se están dictando cursos de alfabetización en todo el mundo. Ora por una iglesia que sepa leer y escribir.
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