Jon Quast comparte algunas perspectivas que adquirió durante una visita a una iglesia tribal.
La visita reciente de Jon y Jen Quast a varias aldeas indígenas destacó la importancia de la Palabra de Dios en la labor de plantar iglesias.
Un vistazo a la vida de la aldea les dio la oportunidad de observar en acción a varias iglesias que hablan guaraní.
El nombre de la traducción de la Biblia al guaraní es Nandejara Ne’e, lo cual significa: “Las palabras de nuestro Amo”.
“Es un término que ellos usan para Dios. Y en cierto modo a mí me gusta ese término”, comenta Jon. Él dice que cada vez que alguien llama a Dios Nandejara, le hace “recordar que Dios en efecto es nuestro Amo… y que la Biblia es Su Palabra”.
Jon continúa: “Las Escrituras no son las palabras del misionero. …Es importante establecer la Biblia como la máxima autoridad de la enseñanza. …La Palabra de Dios es poderosa. …Es posible que un misionero consiga resultados, pero hay una cosa que ningún ser humano puede producir: vida espiritual. Dios es el Dador de la vida… y nosotros podemos llegar a conocerlo y tener una relación con Él basada en Su Palabra”.
Uno de los imperativos de la plantación de iglesias es asegurarse de que la gente tenga acceso a la Biblia en su propio idioma. Jon dice que ninguna obra de plantación de iglesias está completa hasta no lograr esto.
“No importa cuán bien parezcan estar yendo las cosas, necesitamos la Palabra de nuestro Amo para que una iglesia madure. …Alabado sea Dios porque más personas están teniendo acceso al Libro de la vida….
“No des por sentado el hecho de tener una Biblia”, insta Jon, “ciertamente es un privilegio que no todos tienen. Ora para que nosotros podamos tomar parte en ver que toda la gente… tenga acceso a la Palabra de Dios en su propio idioma”.
Pide a Dios que bendiga la traducción de Su Palabra a los idiomas tribales. Y luego pregúntale si Él quiere que tú hagas algo más que orar.