Al misionero Charlie Patton y a su esposa Ruth les gusta hacer caminatas.
“Usualmente”, informa Charlie, “esas caminatas son bien iluminadas y sabemos exactamente a dónde vamos a ir. Incluso sabemos cuán largas van a ser”.
Pero la senda que Charlie se propuso transitar hacia ser un piloto misionero en Brasil ha sido muy diferente —casi nada ha salido según su plan.
En primer lugar, el terreno ha sido desconocido. También la distancia; incluso el destino ha sido incierto a veces.
“Lo único que sabemos”, comenta Charlie, “es que el Señor nos ha pedido comenzar —poner un pie delante del otro y caminar en la dirección de establecer un ministerio de vuelos para servir a las necesidades de nuestros misioneros brasileños que están llevando el Evangelio a grupos étnicos apartados”.
Por varias razones, el camino del ministerio de los Patton ha requerido que Charlie haga a un lado su tiempo personal de vuelos durante dos años.
Charlie tomó y aprobó recientemente el examen escrito de vuelos. Actualmente él está buscando un instructor de vuelos para volar con él a fin de poder registrar las horas exigidas antes de tomar el examen práctico de vuelos para su licencia brasileña de piloto.
Cuando falta el aguante en una larga senda, viene la tentación de dejar de avanzar. Charlie sabe que ellos no tienen control sobre el tiempo del viaje o cómo será la línea de llegada.
“El tiempo está totalmente en las manos de Dios”, comenta él. “Por fe nosotros hacemos planes, y por fe nos sometemos a Su dirección real de nuestros pasos”.
Charlie añade que hay una certeza acerca de esta senda del ministerio.
“La única cosa de la que podemos estar seguros es que Dios es confiable para llevar a cabo lo que tiene en mente”.
Oren por la provisión de Dios de un instructor de vuelos que pueda proveer el tiempo de vuelos que Charlie necesita. Oren para que Dios dirija su camino y lo ayude en el examen escrito a fin de que pronto esté sirviendo a los misioneros que ministran en zonas apartadas de Brasil.
El patrocinio de vuelos para misioneros es clave para el futuro ministerio de Charlie en Brasil. Muchos misioneros que sirven en este país provienen de iglesias brasileñas y no pueden pagar todo el costo del servicio de vuelos.