Fue un día trascendental. Daren Spence, junto con su buen amigo y compañero piloto de NTM, Gerhard Buettner, fueron a probar una nueva pista aérea.
Pasaron varios años desde que los misioneros hablaron por primera vez con los aldeanos acerca de usar un terreno para hacer una pista aérea. Para hallar la franja de tierra precisa se necesitan muchos viajes extensos y agotadores a bordo de una motocicleta todoterreno; en este caso, se inspeccionaron seis terrenos diferentes. Y al final, comenta Daren, el mejor sitio se halló a menos de tres kilómetros de las casas de los misioneros.
Después de haber invertido tanto tiempo en planeación y preparación, fue una culminación emocionante cuando finalmente llegó el día para probar la pista aérea.
“Alabado sea el Señor, el vuelo fue exitoso y esto nos da mucho ánimo”, informa Daren.
El primer aterrizaje es un evento notable. Y puede haber un poco de tensión.
“Después de hacer unos sobrevuelos bajos, nos preparamos para hacer un aterrizaje. Al tocar tierra, inmediatamente nos dimos cuenta de que el equipo y los aldeanos habían hecho un gran trabajo puliendo la superficie desde la última vez que estuve allí. Qué gran privilegio fue poder volar finalmente a esta aldea de difícil acceso”.
Daren dice que después de saludar a todos, él y Gerhard supervisaron la instalación de señales en los extremos, una manga catavientos e indicadores de distancia en la nueva pista.
“Luego hicimos algunos despegues y aterrizajes”, continúa Daren. “Nosotros hacemos esto para nuestra propia práctica como pilotos, a fin de aprender cómo debemos aproximarnos para aterrizar, también para averiguar en qué punto del terreno debemos volver a acelerar a fondo para volver a elevarnos si terminamos demasiado alto o muy rápido. Hay muchas cosas por considerar y estamos acostumbrándonos a usar esta nueva pista con cautela. Todas las pruebas se hacen con el fin de poder establecer los diferentes parámetros bajo los cuales se podrá usar esta pista nueva con seguridad”.
Como la prueba inicial salió bien, Daren pudo transportar a varios misioneros a esta aldea después de que regresaron de un año sabático en Estados Unidos. Él comparte: “No puedo expresar cuán satisfactorio fue poder llevarlos con seguridad a su aldea de ministerio en apenas una hora”. Tim dice que el viaje por tierra habría sido muy difícil y largo para la joven familia.
Tim está consciente del hecho de que cada persona que ora y da para su ministerio de aviación tiene una parte vital en el proyecto de traducción bíblica en que esta joven familia misionera está involucrada. A medida que se desarrollan amistades y se aprende el idioma, y mientras la alfabetización y la traducción preparan el camino para la presentación del Evangelio, él añade: “Cada uno de ustedes que ora por nosotros y apoya este ministerio tendrá una parte directa en la traducción de la Biblia y en la enseñanza de la Palabra de Dios a esta aldea en los meses venideros”.
Den gracias a Dios por el ministerio de aviación de Daren Spence y otros pilotos de NTM que tienen un papel vital en el apoyo y el ánimo de misioneros que viven y ministran en lugares remotos. Den gracias a Dios por las nuevas pistas aéreas y por aquellos que están dispuestos a hacerlas. Oren para que Dios continúe bendiciendo y usando a Daren Spence y su ministerio de aviación con muchas oportunidades de apoyar la edificación de iglesias tribales maduras. Oren por ánimo, gozo, y miles y miles de kilómetros de viajes seguros.