Peter Hypki y su familia han disfrutado de la ayuda de dos grupos de trabajo de su iglesia local, Walnut Hill Bible Church en Baraboo, Wisconsin. Cada grupo vino a ayudar a Peter y a su esposa, Liesl, a preparar su casa en la aldea nahuatl donde están ministrando. El primer grupo instaló la cañería y la electricidad entre otras cosas, y el siguiente ayudó a preparar la casa para la temporada de lluvias que se avecina.
Con estos trabajos hechos en su casa, los Hypiki pueden dedicar más tiempo a fomentar amistades entre el pueblo nahuatl y a aprender la cultura y el idioma.
Peter y su coobrero, Tom Elkins, han tenido cierta dificultad para hallar hombres de esta etnia que les ayuden a aprender el idioma. La mayoría de los más jóvenes trabajan todo el día en los campos. Los hombres que son demasiado viejos para trabajar, permanecen en la aldea y se han convertido en ayudantes valiosos para Peter y Tom. El maestro de idioma de Peter es Antonio, el cual se pregunta por qué los misioneros quieren aprender el idioma, pero siempre está dispuesto a degustar el pan de banano que prepara Liesl.
Antonio se frustra a menudo porque Peter aún no habla con frases completas. Sin embargo, siempre tiene tiempo para sentarse y conversar cuando éste pasa por su casa.
En las noches, los hombres que han regresado de los campos con frecuencia juegan voleibol en la cancha de la aldea. Aunque Peter está limitado a usar frases como –“párate allí” o “cómo pudiste fallar”, los juegos le brindan oportunidades para desarrollar amistades y para practicar el limitado idioma que ya domina.
El equipo está concentrado en aprender la cultura y el idioma tan rápido como sea posible, a fin de enseñar las lecciones bíblicas de Fundamentos Firmes para presentar el mensaje del Evangelio a la gente.