27 de diciembre, 2016
La definición de la palabra re-encauzar es cambiar la dirección o el enfoque de algo. Esta palabra describe con exactitud nuestra situación, pero no necesariamente nuestro corazón.
Los últimos tres meses han pesado mucho en nuestros corazones cuando se acercaron a nosotros con la idea, y la invitación, de que nos quedáramos aquí en Michigan para seguir sirviendo en el Instituto Bíblico de New Tribes, en lugar del ministerio de plantación de iglesias en la región del Pacífico Asiático.
Lo que comenzó como una simple pregunta: “¿cómo será esto?”, se convirtió en muchas conversaciones y muchas oportunidades de ministerio tanto en el instituto, donde ministramos actualmente, como en nuestra iglesia local aquí en Jackson. Muchas veces he orado para que Dios nos muestre lo que Él quiere que escojamos y que yo no sea engañado por un corazón que puede fácilmente fluctuar entre una decisión y otra. Para nosotros fue, y sigue siendo, agridulce pensar en dejar a un lado un sueño en el que Crystal y yo hemos estado trabajando durante los últimos ocho años, pero al mismo tiempo nos damos cuenta que Dios seguirá usándonos para impactar a las personas que están tomando la capacitación y a los hermanos y hermanas de nuestra iglesia.
Con el consejo de la iglesia que nos envía, la iglesia local, y el liderazgo del instituto, hemos decidido quedarnos en Jackson y poner en espera nuestros planes del extranjero para un futuro previsible. No tenemos ningún deseo de decir “No” a un ministerio en el extranjero, y estamos dispuestos a perseguirlo en un momento posterior, pero a través de la oración, de conversaciones y de circunstancias nos damos cuenta que Dios nos está dirigiendo a detener nuestros esfuerzos en esa dirección.
Estamos entusiasmados con los diferentes ministerios que Dios pondrá delante de nosotros en los próximos años, y ¡estamos comprometidos a buscarlo mientras Él guía y dirige nuestro futuro! Seguiremos trabajando como misioneros apoyados en el instituto, como lo hemos hecho durante los últimos tres años, teniendo un papel crucial y eficaz en la capacitación de aquellos que irán y alcanzarán a los perdidos con la verdad de Dios. También vemos esto como una oportunidad de promover y profundizar nuestro impacto y nuestro tiempo con la iglesia, de la cual nos sentimos muy agradecidos de formar parte aquí en Jackson.
Orando por ustedes … Desde Uruguay bendiciónes.