Recordando el Regalo de los regalos
El Regalo de los regalos
1 de enero, 2017
Sentado en círculo, un grupo de unas doce o trece personas estaban discutiendo algo de gran importancia. Como siempre, la canasta normal de nueces de areca y limas estaba disponible, y también un paquete de cigarrillos al alcance de cada hombre adulto; pero en esta ocasión particular sólo había café y arroz. El arroz había sido hecho especialmente para esta ocasión, recién cocinado en bambú, con grasa de cerdo y leche de coco. Este tipo de reunión no es anormal para estas personas sencillas de una aldea pequeña del río Jelai.
Desde la distancia, uno podría ver a este pequeño grupo de personas reunidas y hablando en la casa de alguien más, como el más común de los eventos. Sin embargo, si nos acercáramos y escucháramos la conversación, nos daríamos cuenta de que lo que se está discutiendo no son chismes comunes de la aldea. No, es la historia de las historias, la venida del Rey prometido, la que está llamando la atención de esta docena de aldeanos. En lugar de ser una reunión común, este tipo de rememoración tal vez nunca se había llevado a cabo en este sistema fluvial.
No me malinterpreten, la Navidad y el Año Nuevo son bien conocidos en esta zona. Sin embargo, existe una gran diferencia entre cómo celebra la Navidad la mayoría y cómo se celebra en esta reunión sencilla. La Navidad ha llegado a ser conocida por ser un tiempo para pasar el rato, beber, e inevitablemente emborracharse. Antes que se conociera popularmente la Navidad, había kembaaruan y sapat taun. Estas eran, y siguen siendo, ceremonias de la aldea que ocurren alrededor de esta época del año. Cuando la Navidad llegó a esta zona, con poco o ningún significado para la gente en general, con el tiempo se amalgamó con estas otras ceremonias.
Cuando nos sentamos con estos hermanos y hermanas en Cristo, recordando juntos la narración sobre la visitación de un ángel y un viaje no planeado; la maravilla del parto y el llanto suave de un bebé; las señales en los cielos para los ricos y los pobres, para los que estaban cerca y los que estaban lejos; aquellos que adoraron al niño y aquellos que conspiraron para matarlo; la maravilla y el poder de las buenas nuevas transformadoras de gran gozo para toda la gente, estaban en exhibición.

Para mí lo más destacado fue cuando un hermano concluyó: “No es solo que hemos recibido vida eterna para después de la muerte, sino que también hemos recibido nueva vida ahora mismo”. Para mí este momento resumió lo que celebramos en cada Navidad. ¡Jesús es el regalo que excede a todos los demás!
Las últimas noticias sobre el papeleo de nuestro pequeño hombrecito son que no tuvimos que salir del país para obtener otra visa porque el proceso se ha iniciado para él en este período de nuestro servicio misionero. Estamos agradecidos por tener que viajar menos, pero es probable que tengamos que salir a la ciudad en algún momento de este mes cuando seamos notificados, para firmar su visa. Gracias por orar durante este proceso.

Tuvimos una Navidad y un Año Nuevo muy agradables y tranquilos aquí en la aldea. Tim y las niñas participaron en el juego anual de jalar la cuerda en Año Nuevo, ¡siempre es un evento divertido! Disfrutamos de varias noches especiales con nuestros compañeros de juegos: cantamos, escribimos y recitamos poemas y tuvimos regalos divertidos para ayudarnos a celebrar. Estamos muy agradecidos por tener buena salud últimamente y porque ¡Titus (de casi cinco meses) se está adaptando bien a la vida de la aldea y al calor! Incluso recibió su primer machete que heredó del niño pequeño de nuestros compañeros. No se preocupen, es solo un juguete de madera.
En Su gracia suficiente,
Las ovejas y sus mamás
18 de marzo, 2017
Apreciados amigos,
¡Saludos de primavera! Esperamos que la temperatura esté empezando a subir dondequiera que ustedes se encuentren después de la ola de frío que hemos oído que está afectando a Estados Unidos.

Lamentamos mucho que no hayan oído muchas noticias de nosotros últimamente. Inesperadamente hemos tenido que estar en la ciudad durante el último mes, pero entre tanto, estamos muy agradecidos por la provisión del Señor. Vinimos a la ciudad para asistir a las reuniones regionales, un tiempo magnífico para relacionarnos con el equipo más grande aquí, para tener comunión unos con otros y para escuchar lo que Dios está haciendo en toda esta zona de la isla. A mitad de las reuniones, Titus se enfermó y siguió empeorando. Muchas veces lo llevamos al médico y también a la sala de urgencias, tratando de que lo aliviaran de una tos terrible. A través de radiografías y medicamentos y el asesoramiento de otros trabajadores de la salud de la isla se llegó a pensar que tenía tos ferina. Después de un rato, los síntomas indicaban con mucha claridad que se trataba de eso. Durante dos noches nos quedamos con él en el hospital y no fue sino hasta después de dos semanas enteras de estar recibiendo antibióticos y de estar en una fase diferente de la tos ferina que comenzó a mejorar; fue un tiempo angustioso pues a menudo tenía dificultad para respirar y tosía día y noche con accesos muy fuertes y prolongados. Todo eso para decir que estamos muy agradecidos por la dirección del Señor, ya que pudimos conseguir ayuda y luego vimos al Señor obrar para sanar su cuerpo. Él todavía tiene tos –la llaman la tos de los 100 días por alguna razón, pero está MUCHO mejor y estamos pensando entrar a la aldea el lunes (20 de marzo).
Muchas gracias a cada uno de los que nos siguieron en Facebook o en Breaking Strongholds [Derribando Fortalezas, sitio donde ellos postean sus blogs] y estuvieron orando por Titus durante su enfermedad. ¡Apreciamos sus correos electrónicos y su preocupación por nosotros!

Unos días antes de que Titus se enfermara, había estado leyendo en el libro de Isaías y noté la parte de un versículo que no recuerdo haber leído antes. Habla del Buen Pastor que nos cuida a nosotros, Sus ovejas, con mucha ternura. “Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; PASTOREARÁ SUAVEMENTE A LAS RECIÉN PARIDAS” Isaías 40:11. La última parte me llamó la atención y me animó siendo una madre con tres pequeños. Él conoce todos los detalles de la vida de una “mamá”, conoce sus desvelos, sus muchas ocupaciones, las presiones de educar a los hijos en casa, y los temores de que se enfermen sus pequeños. Así que cuando Titus se enfermó este versículo seguía viniendo a mi mente y consolándome, diciéndome que ¡Él lleva en Sus brazos a los corderos y guía a las madres y a los padres para que sepan cómo cuidar a sus pequeños! ¡Estoy MUY agradecida por la Palabra de Dios que consuela, fortalece y recuerda la Verdad!
Tim ha estado trabajando duro en la revisión y la grabación de nuestras cincuenta y una lecciones de evangelización. Estas lecciones en la lengua materna de las personas con las que trabajamos, cuentan la más grande de todas las historias. Siguen la narración que comienza en Génesis, relatan cómo Dios creó los cielos y la tierra, y continúan hasta llegar a la conclusión de la historia, Dios creando un cielo nuevo y una tierra nueva. Hay muchas personas en la zona donde trabajamos que aunque no estarían dispuestas a asistir a las reuniones de evangelización, escucharían las historias en un reproductor. Tim pudo revisar y grabar la mitad de las lecciones. La próxima vez que salgamos a la ciudad trataremos de terminar ese proyecto.

Nos gustaría pedirles que oren con nosotros en cuanto a quiénes estaría Dios preparando en la aldea para comenzar a reunirse de manera más constante como discípulos de Jesús. Sentimos una carga grande por acercarnos a aquellos que están dispuestos a profundizar en su andar con Jesús. Este es un paso más hacia la capacitación y la preparación de personas que podrían un día ser líderes en la comunidad de creyentes de aquí. Oren con nosotros para que Dios nos dé una idea de a quiénes debemos incluir (o excluir) de esta iniciativa.
Cuando volvamos a la aldea, comenzaremos las reuniones nocturnas de la enseñanza de evangelización y las reuniones con los creyentes. Oren por resistencia y un descanso diario en la provisión del Señor. Es un privilegio extender las buenas nuevas a los que están en tinieblas. Nos encanta ver ojos espiritualmente ciegos, abiertos. Como reflexionó Zacarías:
“Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
Con que nos visitó desde lo alto la aurora,
PARA DAR LUZ A LOS QUE HABITAN EN TINIEBLAS Y EN SOMBRA DE MUERTE;
Para encaminar nuestros pies por camino de paz” (Lucas 1:78–79).


“El que tiene oídos para oír, oiga”
7 de mayo, 2017
Esparcir semillas y confiar en Dios para que dé el crecimiento es a lo que hemos estado dedicados durante unos años. A veces es tentador tratar de hacer crecer las semillas o tratar de averiguar con qué tipo de suelo estamos trabajando. Pero sabemos que nuestra parte es esparcir las semillas dondequiera que estemos y orar para que Dios sea glorificado por medio del fruto.
Tim y yo leímos Lucas 8 esta mañana, el cual incluye la parábola de Jesús del sembrador. El corazón generoso del sembrador sabe, sin duda, que una parte de la semilla caerá en lugares que no darán fruto. Sin embargo, el conocimiento de que algunos no serán receptivos a la semilla, no impide que el sembrador disperse su semilla en todo su campo.
Algunos de nuestros grupos de enseñanza, si nos fijamos en su aspecto exterior resultan risibles. Solo un puñado de personas cuya cosmovisión es muy diferente de la nuestra. Nada que impresione, y mucho que nos intimidaría a primera vista. Sin embargo, hemos cobrado valor con la generosidad del sembrador. Él comparte la Palabra de Dios hasta los fines de la tierra. Aceptando que algunos de sus esfuerzos no darán fruto, pero otros se multiplicarán en una cosecha inimaginable.
Tim y otros tres hombres tuvieron la oportunidad de participar en la enseñanza a unos diecisiete pastores en Malasia durante una semana. Estos hombres trabajan en numerosas y diferentes zonas de aldeas y quieren aprender a compartir mejor de Dios con gente que tenga poca o ninguna base bíblica. Estos diecisiete pastores sirven en muchas aldeas de la etnia Iban a lo largo de Serawak, Malasia. Fue una buena experiencia de aprendizaje para Tim, y para él fue emocionante compartir la enseñanza bíblica fundamental que ha sido de tanta bendición aquí en Deranuk.
Nuestra familia está bien en medio de algunos horarios saturados. Los niños han tenido buena salud y Titus se ha recuperado completamente de su tos ferina. Ahora tiene nueve meses de edad y piensa que ya está listo para empezar a caminar. Le gusta estar en la aldea, adora a sus hermanas y tiene un gran apetito. Dina & Abby están terminando el cuarto grado y anhelando que lleguen las vacaciones de verano de junio.
La semana pasada iniciamos el club de niños en la aldea. Se había demorado en llegar, pero ¡estamos agradecidos porque finalmente ha llegado la hora de empezar a compartir el mensaje de Dios a nivel de los niños! Uno de nuestros amigos se ha ofrecido a acoger el club y tuvimos treinta niños allí la semana pasada. Estamos enseñando algunas canciones que hemos traducido a la lengua local, tenemos un versículo para memorizar, una lección, y juegos y la actividad de colorear. Hemos tomado la canción “Él tiene el mundo entero en Sus manos” y la hemos usado para comenzar a comunicar el poder y la capacidad de Dios, dice así: “El mundo entero está en Sus manos, el mundo entero ha sido creado por Dios, el mundo entero es cuidado por Dios, Él sostiene todas las cosas en Sus manos”. ¡A los niños les encantó aprenderla! Anhelamos ver todo lo que Dios hará en estas pequeñas vidas. Nuestra co-obrera Irene y yo (Andrea) estamos dirigiendo el club. Ora con nosotras por sabiduría mientras enseñamos, y también para que tengamos el dominio de la lengua que necesitamos para comunicar con claridad. ¡Gracias!
Hace poco terminamos una parte de nuestro grupo de estudio nocturno. Dos grupos que estaban estudiando las lecciones bíblicas fundamentales ahora se están mezclando con los otros creyentes. Nuestra esperanza es que el Espíritu Santo manifieste Su presencia en sus vidas. Esperamos también que la comunión de los creyentes los fortalezca y los anime en su nueva fe. Estamos examinando el libro de Hechos y enseñándoles lo que hicieron los primeros creyentes y cómo confiaron en Cristo a través de los desafíos de la vida. ¡Hemos sido alentados por los testimonios de estos nuevos creyentes y sus sencillos pasos de fe!
Muchas gracias por tus oraciones, correos electrónicos de aliento y donativos.
Lo sentimos, nuestra conexión a internet no nos permitió subir fotos en esta ocasión.
En Su gracia suficiente,
Tim & Andrea Ullum
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