21 de marzo
Nuestra conexión a internet es buena en el momento aquí en la aldea –durante los fines de semana a veces es un poco mejor– así que sólo quiero dar un resumen sobre cómo van las cosas para nosotros en África Occidental.
Regresé a Burkina Faso desde Irlanda del Norte a comienzos de febrero, y visité durante unos días a nuestros misioneros que trabajan en el oeste del país, antes de viajar a Senegal para visitar a nuestra gente allí en sus diferentes sitios de ministerio. En Senegal también tuvimos reuniones especiales con dos equipos misioneros que pronto se trasladarán a nuevos sitios de ministerio: un equipo comenzará a trabajar con un grupo étnico grande de Senegal, y el otro con un grupo étnico más pequeño de Burkina. Es muy alentador ver más nuevas obras tribales siendo abiertas en África Occidental.
Mientras yo viajaba, Marina se quedó durante unas semanas más en Irlanda del Norte para ayudar a sus padres a instalarse en su nueva casa. El edificio de dos plantas en que vivían antes se había vuelto impráctico y tuvieron que mudarse a una vivienda de un solo piso.
Marina y yo nos encontramos en la capital de Burkina, Ouagadougou, el 5 de marzo, y después de tomar unos días para gestionar papeleo del gobierno y conseguir alimentos y suministros de oficina para dos meses ya estamos nuevamente en nuestra aldea en Costa de Marfil, viviendo con la gente lorón.
Marina sigue preparando más maestros de alfabetización, y también está enseñando a leer y escribir a un número de jóvenes y adultos. Estoy revisando la traducción del evangelio de Mateo en que el equipo de traducción Lorón (Donald, Samuel y Jeremy) ha estado trabajando. También pensamos visitar algunas de las iglesias de la etnia lorón durante las próximas semanas.
Los creyentes lorones han comenzado un nuevo esfuerzo de evangelización en otra de sus aldeas. Oren por sabiduría y sensibilidad mientras llevan la luz del Evangelio a otro rincón de tinieblas en el norte de Costa de Marfil. Actualmente hay pequeños grupos de cristianos en las más de veinte aldeas de la etnia lorón.
Gracias por sus oraciones,
Paul y Marina