21 de marzo
Queremos compartir una noticia realmente muy buena con todos ustedes. ¿Recuerdan la familia, Noé y Lisa Martínez y sus dos hijas, que se quedó con Aimee durante diciembre y enero hasta que nosotros regresamos de nuestro año sabático? Ellos estaban haciendo aquí el curso de orientación selvática y completando sus estudios del idioma nacional de Papúa Nueva Guinea –la lengua franca melanesia. Se quedaron hasta principios de febrero, así que todos pudimos conocerlos; y estuvimos juntos durante un tiempo, haciendo preguntas y conociéndonos mutuamente. Luego se fueron para orar y tomar una decisión en cuanto a si el Señor quería que ellos se unieran a la obra tigak (“tee-gahk”) de manera permanente. Esperamos pacientemente su llamada telefónica y nos emocionamos cuando llamaron y confirmaron que querían unirse al equipo Tigak; piensan trasladarse a la tribu a finales de abril.
Nuestra familia y Aimee todavía estamos pasando por el doloroso proceso de perder a la familia Carlton. Nos encanta mantenernos en contacto con Tom y Beth y escuchar cómo los está usando el Señor en México con New Tribes Mission. Sabemos que el Señor tiene un plan en medio de todos los cambios, pero no ha sido fácil. ¡Estamos agradecidos porque el Señor decidió darnos nuevos compañeros de trabajo más rápido de lo que hubiéramos soñado!
La enseñanza “Desde la Creación hasta Cristo” se está impartiendo cuatro días a la semana. Es emocionante ver los hombres jóvenes que están asistiendo fielmente y absorbiendo todo. Noé le ha caído muy bien a muchos de los chicos jóvenes y es bueno ver que va a poder evangelizar e impartir el discipulado a más hombres tigaks. Probablemente esta es nuestra mayor necesidad en la iglesia de la etnia tigak (y en las iglesias de todo el mundo) –más hombres piadosos dispuestos y competentes para dirigir la iglesia.
Ned sigue traduciendo el libro de Hebreos y haciendo los preparativos para los próximos chequeos de traducción en otros grupos lingüísticos.
Esta mañana Ned me hizo saber que uno de los postes esquineros de nuestra casa se había “caído”. Los pequeños amigos de Christina lo habían encontrado y lo habían vuelto a apuntalar bajo la casa. ¡Qué alentador! Sólo esperamos que esta casa permanezca en pie el tiempo suficiente para que Ned termine de traducir el Nuevo Testamento en idioma tigak.