La gente kendawangán ha estado esperando oír el mensaje que los misioneros fueron a darles.
Ellos han preguntado una y otra vez: “¿Por qué están ustedes aquí?”. Y los misioneros han respondido: “Nosotros tenemos un mensaje de Dios”.
Muchos kendawanganos viven a lo largo de un sistema fluvial en el sudeste de Asia; su idioma es llamado puang. Los misioneros fueron a vivir entre ellos para fomentar amistades y, finalmente, enseñar la Biblia desde la Creación hasta Cristo.
Ahora el equipo misionero ha comenzado a enseñar en el libro de Génesis y los kendawanganos están oyendo acerca del Creador Dios.
Para llegar a este punto de poder empezar a enseñar cronológicamente a través de la Biblia, cada uno de los seis misioneros pasó: cuatro años en un centro de capacitación especializada para comunicación transcultural; tres años aprendiendo la cultura y el idioma del país donde trabaja; cuatro (o más) años aprendiendo la cultura y la lengua de la tribu; muchas horas de sacrificio personal, ardua labor, reveses y tristezas.
¿Vale la pena esto? Cuando la gente escuche la verdad de Dios y compare Su bondad con sus creencias animistas, la verdad penetrará los corazones de muchos kendawanganos. Eso hace que todo el estudio y todos los sacrificios valgan la pena.
Por favor, ora con nosotros para que Dios suavice los corazones de la gente kendawangán, y para que ellos sientan hambre y sed de oír el mensaje del Evangelio. Ora también por el equipo misionero: Tim y Andrea Ullum; Paul e Irene Pries; y Phil y Shelly Svoboda. Ora para que ellos permanezcan fieles y diligentes en la preparación de lecciones cronológicas para enseñar.