La idea de traducir la Biblia es tan compleja y es un trabajo a tan largo plazo que se requiere de personas muy comprometidas y fieles para lograrlo.
¿Pero qué tal hacer toda esa gran labor sabiendo que la gente a cuya lengua uno está traduciendo ni siquiera sabe leer en su propio idioma?
Ricardo y Sonia Madero informan: “Los cubeos necesitan aprender a leer y escribir para que puedan leer las Escrituras en su propio idioma también”.
Ellos han estado trabajando duro en este mes con un nuevo programa llamado “Ayudante de Alfabetización”, el cual tiene todo el potencial para ayudarles a desarrollar un buen diccionario y libros de lectura para la gente cubea. Ricardo y Sonia tuvieron la visita de una experta en alfabetización que les ayudó a descubrir esta nueva tecnología.
Ricardo comenta: “Sin estos recursos, habríamos tardado meses para encontrar las letras y sílabas repetidas que estábamos buscando; ¡la tecnología tiene sus ventajas!”.
Oremos por sabiduría ya que están desarrollando 22 libros de lectura.