Un viaje donde el dentista normalmente no toma tres días, pero cuando el misionero Gene Trudeau perdió el empaste de un diente en las montañas de las Filipinas, comenzó la aventura.
Gene enseñó a conducir su vehículo todoterreno a uno de sus amigos manobos para que pudiera ayudar en tiempos de necesidad. Pero el día que él quería que Mahan lo llevara hasta la pista aérea, Mahan no estaba disponible. De modo que Gene condujo hasta la pista con su esposa Carol y los maestros bíblicos manobos Piduy y Pulding.
Entre su casa y la pista pasa un río muy rápido. Como ellos debían devolver el vehículo hasta la aldea, Carol condujo de regreso, acompañada por Piduy. Carol logró vadear el río sin incidentes. Luego Piduy llevó de regreso a Carol hasta la pista aérea en su motocicleta. Fue un viaje con muchas sacudidas pero pudieron cruzar el río en balsa.
“Luego esperamos en la pista –y esperamos y esperamos. El avión [llegó] 1 1/2 horas tarde; nosotros ya íbamos a llamar al piloto con nuestro teléfono satelital cuando escuchamos que el avión venía”, informó Carol.
El piloto les dijo que cuando venía a mitad de camino, la correa del alternador se había roto. Preocupado porque la batería pudiera agotarse, regresó a su pista para reemplazar la correa.
Cuando aterrizó el avión, tuvieron que montarse en un carro durante una hora para llegar a la casa de huéspedes de la misión.
Al día siguiente, condujeron hasta la ciudad donde el dentista tiene su oficina. Ellos promediaron 34 km/hrs. en el viaje a la ciudad, debido a reparaciones de la carretera y otros embotellamientos.
Finalmente el diente de Gene fue empastado y los Trudeau quedaron listos para el viaje de regreso.
“Mientras escribimos esto, comentó Carol, “ya estamos de nuevo en nuestra casa de huéspedes de NTM y programados para volar de regreso a nuestra pista pronto. Y en esta ocasión, Mahan deberá estar allí en la pista con nuestro vehículo –si el río no está muy crecido para que el carro pueda vadearlo con seguridad –, y si no está lloviendo para que el avión pueda volar”.
Oremos por Gene y Carol mientras ministran a la gente manobo en zonas distantes. Oremos por los creyentes manobos para que crezcan en el Señor mientras Gene y los maestros bíblicos manobos enseñan y discipulan fielmente.