La gente de la etnia ka’apor está teniendo un renovado interés en la Palabra de Dios.
Muchos ka’apores, incluyendo líderes de la iglesia, dejaron la iglesia y cayeron en el licor, la inmoralidad, el fraude y las deudas. La asistencia a las reuniones de los creyentes había descendido a unos 25.
Hace un par de meses, unos hombres de la iglesia se reunieron con cinco líderes de la misma para confrontarles con su pecado y para animarles a volver al Señor.
“Debido al triste ejemplo de estos hombres, muchas personas de la aldea se cansaron de beber, festejar, pelear y de los accidentes que resultan de las cosas en que están involucrados”, informó Lydia Schuring. “Notaron que aquellos que conocían a Cristo vivían de una manera diferente y muchos de ellos comenzaron a pedir a Reuben [Schuring] que les enseñara.
“El domingo, después de la reunión con los hombres, la edificación de la iglesia estaba abarrotada. Nosotros tratamos de ocultar nuestra sorpresa cuando entramos y no encontramos un lugar para sentarnos. Regresaron creyentes antiguos que no habían asistido por años, trayendo a muchos familiares.
“Muchas personas mayores no salvas, que anteriormente no querían tener nada que ver con Dios, estaban allí, y muchos niños y jóvenes también. Como resultado, nosotros comenzamos a enseñar nuevamente lecciones bíblicas de evangelización los lunes y jueves en las noches.
“Este es un paso muy grande para la generación mayor ya que es difícil para ellos aceptar algo nuevo. Aquellos que siguen viniendo continúan con mucho interés”.
Pero la actividad de cortar madera ha empezado de nuevo y ha hecho que varias familias se marchen a la selva. Este es también el tiempo en que ellos salen a cazar y pescar. Así que oren para que haya un interés continuo por la enseñanza bíblica.
Oren también por Reuben mientras revisa las lecciones y por su capacidad para comunicar eficazmente las verdades que Dios quiere que ellos entiendan.