32 pequeños ajustes a la vida en Dakar
Mi padre siempre me decía que prestara atención a las cosas pequeñas porque se acumulan. No creo que su consejo haya tenido el efecto deseado, pero siempre ha permanecido en mí. Su consejo me llegó a la mente cuando estaba pensando en el estrés que producen los ajustes a la vida de Dakar. Hay cientos de cosas diarias que son diferentes o acontecen de manera diferente de lo que serían en Maryland. Soy producto de vivir en Estados Unidos durante 28 años, así que estoy acostumbrado a vivir en una manera determinada. Cuando tantos detalles de la vida se cambian de repente, se apilan rápidamente.
Una gran parte de lo que quiero hacer aquí en África es comunicarles a ustedes en sus países lo que está aconteciendo y por qué está sucediendo. Cuando escriba boletines informativos, me remitiré a las cosas más destacadas. Esos cientos de pequeños (pero de alguna manera significativos) ajustes que se están acumulando, nunca serán incluidos en un boletín informativo. Uno de los principios que deseo comunicar por medio de este artículo es que esas cosas pequeñas no son malas, simplemente diferentes, desde luego, con la perspectiva apropiada. Después de nuestro primer mes, Cathren y yo hemos compilado una lista de cosas que son pequeñas o de cambios interesantes de la vida tal como la conocíamos. Disfrútenla y siéntanse en libertad de hacernos preguntas:
1. Los parachoques de los autos son usados conforme a su nombre.
2. Consumimos leche entera, pero sabe a agua con sabor a leche.
3. Arroz, arroz, arroz…
4. No tenemos aire acondicionado; los ventiladores de pedestal son imprescindibles.
5. Nuestros niños rara vez usan algo más que sus pañales.
6. La cuerda donde colgamos nuestra ropa hace que algunas prendas queden crujientes.
7. La mantequilla de maní ES 100% natural, es necesario revolverla y NO sabe a caramelo.
8. Nuestros hijos se sientan en nuestros regazos cuando tomamos un taxi (nuestro principal medio de transporte).
9. Desde el asiento de un taxi uno puede comprar teléfonos móviles o minutos de internet, agua, fruta, relojes, alfombras, gafas de sol, zapatos, nueces, periódicos, etc.
10. Siempre hay tierra y polvo en todas partes. Los pisos deben ser limpiados a diario.
11. Sudamos cuando despertamos y cuando nos acostamos.
12. Nos hemos vuelto perezosos, pero todos estábamos tomando 2 o 3 baños/duchas al día.
13. Las hamburguesas las sirven con un huevo y papas fritas encima.
14. Las interrupciones en el servicio de energía eléctrica y de agua son comunes.
15. Para poder beber agua fría es necesario dedicar horas de preparación utilizando un único filtro de agua y botellas para meterla en la nevera.
16. Tenemos palmeras (sí, yo sé, sin duda es un ajuste).
17. Nadie necesita complicarse la vida aprendiendo a usar hornos de micro-ondas. Utilizamos una estufa de gas y un horno que encendemos con un fósforo para calentar cualquier cosa.
18. La gente generalmente es amable (no tan amable como en el viaje de misiones de corto plazo, pero una amabilidad normal).
19. # 18 puede ser debido al hecho de que todo el mundo supone que uno es adinerado.
20. El cambio (que uno necesita para la mayoría de los gastos diarios) es difícil de conseguir.
21. Manualmente echamos seis baldes de agua, de 3 galones cada uno, en nuestra lavadora para una carga.
22. La mayoría de las iglesias de aquí sigue el mismo orden del servicio como una iglesia típica de nuestro país.
23. Los mangos saben mucho mejor aquí.
24. Los murciélagos que vuelan fuera de nuestras ventanas en las noches tienen una envergadura de más de 60 cm.
25. Tenemos compañeros de clase de Hong Kong que no hablan español (aunque son muy divertidos).
26. Es difícil estar en la ciudad todo el tiempo, sin posibilidad de salir (por ahora).
27. Normalmente los hombres no usan camisetas sin mangas; es ofensivo para la religión dominante que muestren sus hombros.
28. Ser abordados por los niños de la calle que piden dinero cada vez que salimos es una dura realidad.
29. Caminar dentro del tráfico puede ser la única manera de cruzar algunas calles.
30. Dormir bajo un mosquitero: ¡muy caliente!
31. ¡Duchas con agua fría! Pero a quién le importa, cuando todo lo que uno hace es sudar durante todo el día.
32 El ajuste más difícil hasta ahora ha sido aceptar el hecho de que la mayor parte del mundo ve a los estadounidenses así……
Dibujo de nuestro paquete de efectos visuales de la sesión de idioma
Hay otras cosas que son difíciles de poner en palabras, pero pueden ver cómo éstas se acumulan. Pero, ¿sabes qué? Cada vez que veo que estoy auto-compadeciéndome por una o por todas éstas, sólo pienso en todo lo que Cristo dejó para ser un bebé humano en el planeta tierra por amor de Su nombre y por amor a mí. Es decir, el Dios que dispuso todas las galaxias en el espacio extraterrestre y mantiene girando a los planetas, el Dios que abomina el pecado pero nos ama en una manera que no podemos comprender plenamente ahora, ese Dios se manifestó en forma humana; voluntariamente. Para que yo pudiera conocer Su nombre y para que pudiera conocerlo a Él personalmente. Cuando vemos eso, dejamos de preocuparnos por el calor, por la comida extraña y por la locura de un viaje en taxi. Dios tiene un plan para redimir y para arreglar las cosas. Él logró eso a través de Cristo y ahora está usando a la iglesia para comunicarlo al mundo. La vida, como todos sabemos, algún día llegará a su fin y se iniciará la eternidad. No creo que nadie pensará en la palabra “ajustes” en el cielo o en el infierno, y ciertamente no quiero que pequeños ajustes me priven de lo que es mejor mientras Dios nos tenga aquí en este lado de la eternidad.
Panaderías, bilingües, y misioneros malos
Varias mañanas a la semana, después de despertarme y darme una ducha, salgo y cruzo la calle hasta la panadería. La panadería de la esquina de nuestra calle es uno de los muchos lugares donde puedo comprar baguettes (un pan francés largo y delgado). Nosotros comemos trozos de baguette de vez en cuando, pero lo compro principalmente para nuestra niñera y para quien nos ayuda en la casa. En cierto modo es parte de nuestra responsabilidad como empleadores proveer desayuno para ellos y el baguette es uno de sus favoritos en el desayuno. He estado cruzando la calle y comprando pan en el mismo lugar durante casi dos meses; todos los días veo los mismos rostros en el otro lado del mostrador. Tras advertir esto por primera vez hace aproximadamente un mes, sentí el deber de conocer personalmente a los trabajadores que me atendían. Había tres problemas que debía afrontar para lograr esto:
El primero de estos problemas es el más obvio: el idioma. La gente que vive aquí habla wolof, y la mayoría habla francés como segunda lengua. Ahora, Cathren y yo hemos estado estudiando francés durante un mes y medio ya, y la verdad es que sé cómo decir: “Hola, ¿cómo estás, ¿cómo te llamas?”. Sin embargo, todavía tengo que concentrarme y pensar en ello para salga bien. Una cosa es decir nuevas frases en la intimidad de mi apartamento, pero otra cosa es estar frente a frente con senegaleses verdaderos e intentar comunicarme con ellos; ¡puede ser aterrador! Ya he ido a esta panadería y causado mucha confusión cuando digo cantidades equivocadas, no puedo decir el nombre de algún producto que quiero, y no pago con la cantidad correcta de dinero. Independientemente de todo esto, sé cómo decir las frases, simplemente se trató del hecho de que tenía temor.
El segundo problema es: Estoy cansado. No soy una persona madrugadora. Aun después de una buena ducha con agua fría, sigo un poco somnoliento y no siento ganas de pensar mucho ni de hablar con la gente; especialmente en francés. Emery todavía puede despertarnos de vez en cuando en las noches, y a Iesley le emociona despertarnos a las 6 am casi todas las mañanas. Todo eso para decir: cuando entro en la panadería en la mañana, estoy muy contento mirando al suelo hasta que estoy en la caja registradora. Una vez allí, para mí está bien murmurar “buenos días, un pan, gracias, hasta luego”. Así que no soy una persona madrugadora. Sigue siendo una excusa poco convincente.
La tercera excusa es un tanto legítima pero no coherente. La panadería puede ser un lugar muy concurrido en las mañanas y uno tiene que competir por un lugar en la fila. La gente tiene que ir a otros lugares y la panadería debe mantener un ritmo constante para atender el flujo de clientes. Aunque de vez en cuando puedo entrar y puede estar prácticamente vacía. La gente entra por oleadas y esos son los momentos en que siento el mayor convencimiento.
Pues bien, hoy salí y crucé la calle. Mientras caminaba, pensaba en cómo me gustaría cumplir con mi deber cuando llegara la oportunidad y conocer esos rostros que veo casi todos los días. Casi siempre hay un joven en particular que se encuentra en la caja registradora. Con él es con quien yo hablo, y con él me veo cara a cara. No es malo conmigo, pero tampoco diría que es particularmente amable; más que nada parece curioso. Él, junto con los demás trabajadores, puede identificarme entre el gentío por obvias razones, así que saben quién soy, aunque no nos CONOCEMOS.
Entonces entré y no había casi nadie en la fila de la panadería. El convencimiento era muy intenso, pero inmediatamente comencé a decirme a mí mismo que estaba cansado, que no era necesario estar hablando con la gente tan temprano en la mañana, y que probablemente no querían que yo supiera sus nombres. Así que le dije al joven lo mismo que le digo todos los días, le pagué y me despedí. Pero antes de que pudiera darme vuelta y alejarme, me dijo algo completamente inusual. Me detuve y lo miré atentamente; le lancé una mirada universal que le decía que yo no había entendido lo que él había dicho y que debía repetirlo. La mirada funcionó y él repitió lo que había dicho; en ese mismo instante pude deducir que me estaba preguntando si yo hablaba wolof. Me alegré de haberle entendido, pero decepcionado le dije en francés: “Wolof no, un poco de francés”. Acaba de decir estas palabras cuando recordé que sabía algunos saludos en wolof. Mis ojos se iluminaron, levanté mi mano hacia el techo y apuntando con mi dedo dije: ¡Ah, ha! Y comencé a saludar en wolof a mi audiencia cautiva; ellos rieron y se emocionaron un poco conmigo. Pero luego el hombre siguió hablándome en wolof y yo le lancé otra mirada universal que decía que no entendía lo que él estaba diciendo. Una de las chicas que trabaja allí tradujo y dijo: “¿cuál es tu nombre”? Apenas podía creerlo; emocionado le dije mi nombre y estreché su mano. Pude preguntarle cuál era su nombre justo cuando estaba comenzando a formarse una fila. Me dijo su nombre y después decía repetidamente “mañana”, con una gran sonrisa en su rostro mientras regresaba para atender la fila de personas. Salí sintiéndome bien por lo que había pasado, pero luego, lentamente, empecé a sentirme triste porque no había sido yo el que había hablado primero.
Regresé al apartamento solamente para descubrir que la clase había sido cancelada. Así que después del desayuno me senté y Iesley trajo un libro de historias bíblicas y me pidió que le leyera la historia de Jonás. Iesley se sentó en mi regazo mientras yo le aconsejaba que no tiene ningún provecho huir de los planes que Dios tiene para uno. Le expliqué que Jonás fue desobediente al tratar obstinadamente de no hacer lo que Dios le estaba diciendo claramente que hiciera.
Sobra decir que me sentí como un siervo bastante malo después de dar este consejo a mi hija de dos años. Estaba decepcionado conmigo mismo, pero fui capaz de alabar a Dios por no desistir de enseñarnos y usarnos. Si mi crecimiento espiritual dependiera totalmente de mí, simplemente no crecería. Mi desobediencia en ninguna manera impide que Dios concluya lo que está haciendo. Qué impresionante es eso. Aborrezco mi pecado pero me encanta Su naturaleza soberana y todopoderosa. Me encanta cómo Él ha derrotado el pecado y promete no dejarme en la condición en que nací. Eso es suficiente para hacerme querer permanecer aquí en África y tratar de hablar con la gente en francés; es suficiente para hacerme querer cambiar.
Gracias por orar por nosotros. No somos buenos misioneros. No creo que haya buenos misioneros, solamente un Dios bueno. Así que vamos a fallar un poco más, y aun nos asustaremos y aun huiremos de lo que Dios quiere para nosotros. Pero eso no cambiará la gracia de Dios y la edificación de Su reino. Espero que nuestra incapacidad no les haga desistir de apoyarnos, sino que más bien les anime a ser parte de lo que Dios está haciendo en sitios del mundo donde el Evangelio nunca ha estado.
Mensaje FB compartido
Antes de salir de Estados Unidos, les dije a muchas personas que estaría utilizando este blog con frecuencia. Después de llegar a Senegal, le dije lo mismo a un compañero misionero que iba adelante de nosotros en el curso del idioma. Su respuesta fue “buena suerte”; la “suerte” no ha estado de mi lado y me disculpo por no haber mantenido informados a todos ustedes. Aún así alabo a Dios de que estamos ocupados (realmente lo estoy), pero nos encontramos agotados muy a menudo. Todavía pienso mejorar en la comunicación de noticias con mayor frecuencia y con dosis más pequeñas de información; por favor, oren para que yo pueda ser un buen comunicador.
Bien, esta mañana respondí un mensaje de un querido amigo. Sé que es alguien que me aprecia y cree en el trabajo del cual somos parte. Debido a eso, una simple respuesta se convirtió en una información medio decente con las últimas noticias del ministerio, y pensé que a otros podría resultarles interesante. Después de enviarle el mensaje a mi amigo, me imagine que podría cortar algunas de las partes más personales y publicarlo en el blog. Así que, perdonen la falta de estructura, gramática y ortografía. ¡Gracias a todos!
¡Gracias por orar por alimento espiritual! Sinceramente es lo que necesitamos. Las predicaciones aquí todavía son imposibles, especialmente mientras restringimos a nuestros niños durante dos horas. En cierta medida tengo una rutina con mi lectura de las Escrituras, pero aún me veo poniéndome los auriculares e iniciando las grabaciones de francés antes de tomar mi Biblia; entonces tengo elegir; dejar de escuchar y tomar mi Biblia o simplemente seguir adelante con el francés; nunca siento que estoy al día con el idioma, por lo tanto, siento que debo estar estudiando siempre. Cristo ES el equilibrio, así que……..lo necesito a Él por encima de todo lo demás.
He estado trabajando con mi nuevo ayudante de idioma ya por 3 semanas, y es difícil explicar lo que es eso. De un lado, siento como que estoy ahogándome con el idioma francés, por otro lado, alabo a Dios por proveerme un joven que es como tener un amigo con el que puedo pasar el rato y divertirme un poco. Es divertido tener a alguien con quién reír cuando masacro completamente el idioma y no siento que lo estoy frustrando ni ofendiendo.
Casi todos los días camino más de cuatro kilómetros de ida y vuelta a clase. Esto ha sido muy bueno para fortalecer mis relaciones con las personas de nuestro vecindario y para fomentar nuevas amistades con extraños que encuentro todos los días a lo largo de la ruta. Me da la oportunidad de hablar y también de entrever su cultura. Para nosotros en Estados Unidos, el tiempo de calidad entre personas consiste principalmente de aquello de que se habla. Pero aquí, significa más para la gente que uno esté con ellos. Si puedo estar con alguien y mostrarles que quiero estar con ellos, hablando o no, eso significa mucho para ellos. Sin embargo, esto ha llevado a dado lugar a una carga pesada en mi corazón. Ahora puedo ver cómo la religión dominante gobierna la manifestación de la vida aquí. Es otra cosa que para mí es difícil comunicar. Como estadounidense, veo muchas cosas aquí que son alarmantes y que me hacen enojar. Veo otras cosas que me maravillan y me pregunto: ¿cómo y por qué son estas personas tan buenas para cuidar de los demás. Ellos realmente viven como una comunidad, en una manera que Estados Unidos nunca podrá. Pero, de nuevo, los estadounidenses rara vez dañan buses para bloquear una carretera como medio de protesta; como dije, es algo difícil de explicar.
Todo eso para decir, cuando nuestra alma abandone nuestro débil cuerpo, Dios no se fijará en cuán bien vivimos en comunidad, sino que buscará la sangre de Cristo; algo que ni los más devotos de los hombres religiosos pueden cumplir por sí mismos. Me encuentro preocupado por estas personas. Pero por ahora, Dios tiene algunas cosas para enseñarme. Él está exprimiendo mi fe y me está mostrando que todo esto tiene que ver con lo que Él está haciendo. Dios nunca me ha necesitado, ni lo hará; pero en los Estados yo podría compartir mi fe con palabras; no puedo hacer eso ahora mismo. Tengo que confiar en que Dios está haciendo lo que siempre ha estado haciendo: Dando a conocer Su nombre en la tierra y formando un pueblo para Sí mismo.
Teniendo en cuenta algunos de los acontecimientos actuales del mundo, oren por nosotros, por favor. He estado leyendo el evangelio de Mateo y este versículo me ha cautivado últimamente: “He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como serpientes, y sencillos como palomas”. Quizás por el momento es bueno que no pueda hablar. No sé cómo ser sabio en Senegal, pero confío en que puede ser exactamente lo que Dios está haciendo en mí durante este tiempo.
¡Huy! De acuerdo, es un mensaje extenso. Tal vez necesitaba sacar todo esto. Gracias, hermano, por tus continuas oraciones por mi familia. Nosotros también estamos afligidos por la distancia que hay entre nosotros y la realidad de eso está creciendo cada día. Pero escucha, la vida no es sino un soplo; no la malgastemos. Dale nuestros saludos a la familia; todavía pienso llamarte en algún momento porque sé que aún hay mucho de qué hablar de tu parte. Hasta más tarde, amigo.