Gracias a que Él no escatimó a Su Hijo
Después que los maestros bíblicos dinangats enseñaron durante dieciséis semanas acerca de la Creación, la caída del hombre, la entrega de la ley, los intentos fallidos del hombre por salvarse a sí mismo y todas las historias de la Biblia que predecían la venida de Cristo, la gente ya estaba respondiendo con cosas como: "¡Yo necesito ser salvo!". Cuando ellos presentaron el Evangelio –la muerte, sepultura y resurrección de Cristo— la respuesta fue unánime. Da gracias a Dios por Su obra entre el pueblo dinangat.